¿Sabes qué es el seguro a primer riesgo?

Publicado el 1 de Junio de 2023 by Expertos en seguros y bienestar, Equipo Génesis
Tiempo de lectura estimado: 4 minutos

Te explicamos qué es el seguro a primer riesgo y en qué casos es conveniente, para que protejas los bienes que más te interesan sin pagar de más.  Comprar una vivienda es una de las mayores inversiones que hacemos a lo largo de nuestra vida, por lo que es importante que tomemos todas las medidas necesarias para protegerla. Contar con un seguro de hogar nos brinda seguridad y garantiza una solución rápida a problemas comunes como las roturas de tuberías, las goteras y los daños eléctricos. 

El seguro a primer riesgo 

El seguro multirriesgo de hogar es la opción más extendida y conocida pero también podemos apostar por la modalidad de seguro a primer riesgo. ¿Qué se entiende por seguro a primer riesgo? El seguro a primer riesgo es un tipo de seguro de hogar que cubre un riesgo determinado hasta una cantidad acordada de antemano, independientemente del valor del bien dañado. En práctica, somos nosotros quienes realizamos la declaración de los bienes y el valor que asignamos a cada uno de ellos. Eso significa que no se aplica la regla proporcional en caso de que la suma asegurada sea insuficiente, de manera que evitamos caer en una situación de infraseguro, con todos los dolores de cabeza que ello conlleva. 

Además, con el seguro a primer riesgo podremos saber en todo momento qué indemnización recibiríamos en caso de siniestro y se simplifica bastante el proceso de reclamación si sufrimos un robo o cualquier otro percance cubierto por la póliza. Sin embargo, si los daños son superiores al valor establecido, no podremos cubrir completamente la sustitución o reparación de los bienes afectados, por lo que es importante que aseguremos la suma adecuada. De hecho, tampoco podemos declarar una suma mayor al valor real de los bienes ya que caeríamos en una situación de sobreseguro. Los tipos de seguro a primer riesgo Se puede suscribir un seguro a primer riesgo sobre el continente o sobre el contenido, aunque independientemente del tipo de póliza que elijamos, la garantía cubierta bajo esta modalidad y la suma a indemnizar debe estar detallada en las condiciones del contrato. El seguro a primer riesgo también suele cubrir los daños que sufran otras personas en nuestra vivienda y aquellos por los cuales tengamos la responsabilidad civil. En ese caso, lo usual es que cubra el pago a las personas perjudicadas, la defensa jurídica y los gastos judiciales, según los límites establecidos en la póliza.

Diferentes usos del seguro a primer riesgo 

Seguro sobre el continente

Si nuestra comunidad de vecinos ya cuenta con una póliza, el seguro a primer riesgo sobre el continente puede ser una opción muy interesante para cubrir las carencias de esa póliza de la comunidad. En este caso, el seguro se suele contratar por un capital inferior al valor total del continente, pues una parte de este quedará cubierto con la póliza de la comunidad. También es una opción muy interesante si estamos en régimen de alquiler ya que nos permite solucionar rápidamente cualquier avería de la que el propietario no quiera hacerse cargo.

Seguro sobre el contenido

Este seguro a primer riesgo es muy conveniente si tenemos objetos de valor en casa, como joyas, obras de arte o muebles y electrodomésticos costosos ya que, en caso de siniestro o robo, la aseguradora nos indemnizará la cantidad establecida de antemano, no aplicará la regla proporcional. De hecho, este tipo de seguro se recomienda cuando el valor total de los bienes asegurados es elevado ya que así se evita contratar una póliza por la totalidad de los bienes pero podemos cubrir los incidentes que más nos interesan.

Diferencias entre el seguro a primer riesgo y el seguro a todo riesgo

Aunque ambos tipos de seguro ofrecen protección contra pérdidas y daños, el seguro a primer riesgo tiene un límite máximo de indemnización acordado, mientras que el seguro a todo riesgo cubre los bienes por su valor total. Además, el seguro a primer riesgo suele ser más económico, pero puede implicar un mayor riesgo para el asegurado en caso de pérdida total.

Preguntas frecuentes sobre el seguro a primer riesgo

¿Es obligatorio contratar un seguro a primer riesgo?

No, es opcional y no suele ser obligatorio por ley, pero puede ser recomendado para una protección efectiva sin costos excesivos.

¿Cuál es la duración de un seguro a primer riesgo?

La duración puede variar, pero suele ser anual y se renueva automáticamente si no se solicita la cancelación

¿Puedo cambiar el límite de indemnización durante la vigencia del seguro?

Sí, generalmente se puede ajustar el límite de indemnización durante la vigencia del contrato, sujeto a la aprobación de la compañía aseguradora.

¿El seguro a primer riesgo cubre los daños causados por fenómenos naturales?

Sí, en la mayoría de los casos, cubre daños causados por fenómenos naturales como terremotos, inundaciones, y tormentas, pero es importante verificarlo en la póliza.

Razones por las cuales las personas no contratan un seguro

Publicado el 23 de Diciembre de 2023 by Expertos en seguros y bienestar, Equipo Génesis
Tiempo de lectura estimado: 5 minutos

Te contamos cuáles son los mitos más populares sobre los seguros y te explicamos por qué son completamente falsos.  A menos que se trate de un seguro obligatorio por ley, como el seguro del coche, muchas personas se lo piensan dos veces antes de contratar una póliza. A veces les detienen algunas creencias erróneas que no tienen una base real, o al menos no se adaptan a los tiempos que corren ya que el sector asegurador ha cambiado mucho en los últimos años para adaptarse mejor a las demandas de la sociedad.

Mitos sobre la contratación de seguros

Los seguros son demasiado caros

Muchas personas creen que contratar un seguro es demasiado caro y no pueden permitírselo. Sin embargo, a largo plazo una póliza de salud, un seguro de hogar o un seguro para las mascotas representan un gran ahorro, además de una gran tranquilidad. Hoy las aseguradoras proponen fórmulas prácticamente hechas a medida, por lo que podrás asegurar exactamente lo que necesitas sin pagar de más. Te asombrará descubrir que tomarte una taza de café todos los días en el bar te costará mucho más al año que contratar algunos seguros.

Los seguros no te cubren cuando más lo necesitas

Las aseguradoras están obligadas, por ley, a brindar un servicio acorde al contrato firmado con el tomador del seguro. El problema es que en muchas ocasiones las personas no leen la letra pequeña y asumen que la póliza que han contratado cubre todo tipo de contingencias, sin límites de indemnización. Por eso, lo más importante antes de contratar cualquier tipo de seguro es cerciorarte de que te ofrece las coberturas que realmente necesitas, así evitarás sorpresas desagradables.

Los seguros son para ancianos

Hay quienes creen que los seguros de vida son productos diseñados para personas de la tercera edad. En realidad, los seguros de vida ofrecen numerosas opciones más allá de las clásicas coberturas ante defunción o invalidez. El seguro de vida y ahorro, por ejemplo, ofrece una excelente rentabilidad en comparación con el ahorro bancario convencional, y se puede recuperar más tarde en forma de renta vitalicia. Obviamente, lo ideal sería contratar estos seguros antes de cumplir los 50 años.

Todos los seguros son iguales

Algunas personas se dejan influenciar por las malas experiencias de otros asegurados pensando que todos los seguros son iguales. Sin embargo, si bien todos los seguros cumplen la función de proteger, son muy diferentes entre sí, no solo en relación con el objeto que se protege sino también respecto a sus coberturas. El servicio que ofrece la aseguradora también marca grandes diferencias en términos de rapidez, fiabilidad y profesionalidad.

Solo necesitas un seguro si tienes un problema

Los problemas siempre están aguardando a la vuelta de la esquina, el objetivo del seguro es anticiparse a ellos para que puedas vivir sabiendo que estarás respaldado ante cualquier contingencia, ya se trate de un problema de salud, un accidente de tráfico o un incidente en tu vivienda. Los seguros se contratan precisamente para contar con una mayor tranquilidad pues, en comparación con las primas que pagas, el ahorro que representan suele ser considerable.

Desmitificando los mitos sobre la contratación de seguros

Después de explorar y desentrañar algunos de los mitos más arraigados en torno a la contratación de seguros, es esencial reflexionar sobre la importancia de tomar decisiones informadas y conscientes en este ámbito. Los seguros son una herramienta fundamental para proteger nuestra salud, patrimonio y estabilidad financiera ante eventos imprevistos o emergencias.

Es comprensible que existan dudas y preocupaciones sobre los seguros, especialmente cuando se propagan mitos que pueden generar confusión o desconfianza. Sin embargo, al profundizar en la realidad detrás de estos mitos, podemos apreciar mejor el valor y la utilidad que los seguros ofrecen en nuestras vidas.

Recordemos que la contratación de un seguro no solo proporciona una protección financiera en momentos de necesidad, sino que también brinda tranquilidad y seguridad a nosotros y a nuestros seres queridos. Al entender y superar los mitos comunes sobre los seguros, podemos tomar decisiones más informadas y tomar medidas proactivas para garantizar nuestra seguridad y bienestar a largo plazo.

Si este artículo te ha hecho cambiar de opinión sobre los seguros, entra en Génesis Seguros y conoce todos las opciones de seguros disponibles para ti.

Preguntas frecuentes sobre las razones por las cuales las personas no contratan un seguro

¿Qué aspectos financieros influyen en la decisión de no contratar un seguro?

Las preocupaciones financieras, como el costo de las primas de seguro, pueden ser un factor importante que influye en la decisión de algunas personas de no contratar una póliza. También pueden preocuparse por no poder pagar el seguro en caso de necesidad.

¿Cuáles son los malentendidos comunes sobre la necesidad de tener un seguro?

Algunas personas pueden subestimar el riesgo de enfrentar situaciones imprevistas que podrían causar pérdidas financieras significativas. También pueden no comprender completamente los beneficios y la importancia de tener una protección adecuada a través de un seguro.

¿Qué otros factores pueden influir en la decisión de no contratar un seguro?

Otros factores que pueden influir incluyen la percepción de que son jóvenes y saludables, la confianza en la capacidad de afrontar cualquier eventualidad por sí mismos o la falta de conocimiento sobre los diferentes tipos de seguros disponibles.

¿Cuáles son las posibles consecuencias de no tener un seguro?

La falta de seguro puede dejar a las personas vulnerables a graves repercusiones financieras en caso de accidentes, enfermedades o pérdidas inesperadas. Esto podría resultar en la acumulación de deudas, la pérdida de activos o dificultades financieras a largo plazo.