¿Vas a viajar en moto este verano? Te contamos cuáles son las revisiones que no debes pasar por alto.

Con la llegada del verano y el buen tiempo vuelven los viajes en moto por carretera. Sin embargo, si no quieres llevarte sorpresas de último momento antes de poner rumbo a tu destino, será mejor que revises tu moto con antelación y la pongas a punto. Así podrás comprobar que está en perfecto estado, lo cual no solo alargará su vida útil, sino que te garantizará una mayor seguridad en la vía.

Todo lo que debes revisar antes de poner tu moto en marcha otra vez

Antes de salir de viaje es importante que te cerciores de que la documentación de tu moto está en regla y que la ITV del vehículo aún está en vigor. Si no es así, debes pasar la revisión de la ITV antes de volver a la carretera. Sin embargo, tanto si has dejado la moto hibernando durante todo el invierno como si la has usado esporádicamente, existen algunas revisiones y mantenimientos básicos que debes hacer antes de emprender un viaje largo.

Revisa la batería

Cuando llevas mucho tiempo sin usar la moto, la batería suele descargarse. Si fuiste precavido y la dejaste conectada a un mantenedor de baterías o la recargaste de manera periódica, solo tendrás que comprobar su nivel de energía y reconectarla. Si no lo hiciste o solo desconectaste los bornes, es probable que tengas que recargarla.

Comprueba el estado de los neumáticos

Tras varios meses sin usar, los neumáticos pierden presión, por lo que tendrás que ponerles aire. Si no guardaste la moto sobre un caballete, es probable que los neumáticos también se hayan deformado o agrietado debido al peso de la moto. En ese caso, es probable que tengas que cambiarlos.

Inspecciona el funcionamiento de los frenos

Los frenos no suelen desgastarse por la inactividad de la moto, pero conviene revisarlos. Comprueba los cables, las canalizaciones, los discos y tambores y asegúrate de que estén en perfecto estado. Echa un vistazo además a las pastillas de freno. Si la superficie se ha cristalizado y endurecido, puedes depurar esa primera capa frenando varias veces cuando utilices la moto por primera vez. Si no funciona o las pastillas tienen signos de desgaste, tendrás que cambiarlas.

Verifica los niveles de líquidos

Además de revisar que los líquidos de la moto no hayan sufrido ninguna fuga, cerciórate de que tengan los niveles adecuados. Con la moto fría, verifica el líquido refrigerante. Asimismo, comprueba el líquido de freno y el aceite del motor. Si no tienen los niveles adecuados, rellénalos o cámbialos.

Engrasa y tensa la cadena 

Al sacar tu moto del garaje, es probable que tengas que limpiar la cadena ya que el polvo que se ha acumulado sobre el lubricante puede afectar su funcionamiento. Una vez limpia, comprueba que tenga la tensión correcta y engrásala. Antes de poner la moto en marcha, retira el exceso de lubricante con un paño limpio.

Revisa las luces

Conducir la moto con una bombilla fundida no solo puede acarrearte una multa de 200 euros, sino que también pondrá en peligro tu seguridad. Así que antes de ponerte en marcha, revisa que todas las bombillas funcionan correctamente. Si alguna está rota o falla al encender, cámbiala por una nueva.

Cambia el combustible

Si cuando guardaste la moto dejaste el depósito vacío solo tendrás que llenarlo antes de volver a circular, pero si lo dejaste lleno, lo más probable es que debas sustituirlo. Recuerda que cuando almacenas el combustible durante mucho tiempo su estructura se descompone y puede llegar a afectar el funcionamiento del motor.