Cómo aparcar en línea: guía paso a paso para no fallar

Publicado el 15 de Mayo de 2025 by Raquel Barbadillo, Copywriter especializada en comunicación sostenible
Tiempo de lectura estimado: 6 minutos
Coches aparcados en línea

Aparcar en línea puede parecer más difícil cuando hay mucho tráfico, poco espacio o presión por detrás. Por si alguna vez te has visto en esta situación y sientes que te falta práctica o tranquilidad, te recordamos cómo en línea de forma correcta y con seguridad.

¿Qué significa aparcar en línea y en qué se diferencia de otros tipos?

Aparcar en línea (o en cordón) es estacionar el coche paralelo al bordillo de la acera, generalmente entre dos vehículos. La dificultad de este tipo de aparcamiento radica en el hecho de que se suele encontrar en calles urbanas donde el espacio es limitado.

Se diferencia de otros tipos de aparcamiento como:

  • Aparcamiento en batería: los coches se colocan perpendicularmente a la acera, de tal manera que se quedan los coches en paralelo.
  • Aparcamiento en oblicuo: los vehículos se sitúan en diagonal respecto al bordillo, similar a en batería pero con una inclinación a derecha o izquierda.

Pasos para aparcar en línea correctamente

Aunque te lo enseñaran en la autoescuela, nunca está de más recordar cuáles son los pasos para aparcar en línea sin acabar torcido o rozando el bordillo. Esta es la secuencia detallada de cómo realizar la maniobra de aparcamiento en línea:

1. Señaliza y detén el vehículo al lado del hueco

Activa el intermitente derecho y colócate paralelo al coche que está justo delante del hueco, dejando unos 50 cm de separación.

2. Alinea tu coche con el vehículo de delante

La parte trasera de tu coche debe coincidir con la del coche de al lado. Esa será tu referencia para iniciar la maniobra.

3. Gira el volante al máximo y comienza a retroceder

Gira el volante hacia la acera todo lo que puedas y comienza a dar marcha atrás con suavidad. Controla los retrovisores para no tocar el coche de atrás ni el bordillo.

4. Endereza el volante y ajusta la posición

Cuando la parte trasera esté dentro, para y gira el volante al otro lado para meter la parte delantera. Repite el paso 3 y 4 en breves desplazamientos hacia delante y hacia atrás hasta que quede recto y centrado.

Trucos y referencias para aparcar en línea a la primera

Saber los pasos está bien, pero tener un par de trucos bajo la manga marca la diferencia. Aquí van algunos que te pueden salvar el día:

  • Cuando veas la puerta trasera del coche de delante por tu ventanilla trasera, comienza la maniobra.
  • Si el retrovisor derecho apunta al bordillo, es momento de enderezar.
  • Mira por encima del hombro: a veces es más fiable que los espejos.
  • Practica con conos si no quieres jugarte el parachoques.

Errores comunes al aparcar en línea y cómo evitarlos

Por mucho que lo hayas practicado, hay fallos que se repiten, sobre todo cuando cambias de coche o conduces uno que no es el tuyo habitual. Aquí van los más comunes:

  • Rozar el bordillo: ve despacio y corrige a tiempo.
  • Estacionar el coche mal centrado: asegúrate de dejar espacio delante y también detrás.
  • Girar el volante demasiado tarde: usa referencias visuales para anticiparte.
  • No señalizar a tiempo: usa el intermitente siempre antes de iniciar la maniobra y con anticipación para evitar que el que va detrás de ti se pegue demasiado.

¿Cómo practicar el aparcamiento en línea de forma segura?

Nadie nace sabiendo aparcar. Si quieres mejorar, necesitas práctica, pero mejor si lo haces sin ponerte en situaciones estresantes.

Busca calles tranquilas o aparcamientos vacíos para practicar cómo aparcar en línea. Usa conos, cajas vacías o indicadores como si fueran coches y calles estrechas. Repetir la maniobra una y otra vez te dará soltura y confianza.

Comparativa rápida: aparcar en línea vs en batería vs en oblicuo

Tipo de aparcamiento

Dificultad

Frecuente en

En línea

Alta

Calles urbanas.

En batería

Baja

Aparcamientos grandes.

En oblicuo

Media

Calles anchas señalizadas.

Consejos para aparcar en línea en situaciones difíciles

Por mucho que hayas practicado, al volante te encontrarás con situaciones en los que la dificultad para aparcar en línea es especialmente complicada. No te preocupes, con estos consejos salvarás las dificultades:

  1. Poco espacio: ajusta bien los giros y no tengas miedo de hacer más de una maniobra. Incluso vuelve a la posición inicial si ves que no está entrando lo suficiente el vehículo.
  2. Tráfico denso: señaliza con tiempo y no te aceleres. Es preferible tardar un poco más que golpear algo.
  3. Calles en pendiente: usa el freno de mano y controla el embrague para que el coche no se te vaya. Con coches de cambio automático, no te ocurrirá.

¿Cómo salir de un aparcamiento en línea sin riesgo?

Salir bien, también tiene su truco. Sigue estos pasos y evitarás sustos o tener que dar parte al seguro por despistes:

  1. Enciende el intermitente.
  2. Mira por los retrovisores y también el ángulo muerto.
  3. Avanza poco a poco girando el volante hacia fuera sin quitar la vista del retrovisor.
  4. Espera a tener espacio suficiente antes de incorporarte del todo.

TE INTERESA:

Preguntas frecuentes sobre cómo aparcar en línea

¿Se puede aparcar en línea en calles estrechas?

Sí, siempre que no se impida el paso de otros vehículos, y no esté señalizado lo contrario (Art. 91 del Reglamento General de Circulación).

¿Qué pasa si toco el bordillo en el examen práctico?

Según los criterios de evaluación de la DGT, tocar ligeramente el bordillo no siempre es motivo de suspenso, es solo una falta leve. Sin embargo, subir una rueda al bordillo sí se considera falta eliminatoria.

¿Cuáles son las medidas estándar de un aparcamiento en línea?

La medida la determina cada municipio, por lo tanto, no hay un estándar. En grandes ciudades, como Madrid, el estacionamiento en línea debe tener como mínimo debe tener un ancho de 2 metros, aunque recomienda 2,25 m. Consulta la normativa autonómica o municipal.

¿Cómo saber si el coche está bien centrado?

Desde dentro del coche, comprueba que hay espacio similar delante y detrás. Los retrovisores deben quedar alineados con los coches vecinos y las ruedas no deben tocar ni sobresalir del bordillo.

¿Quién está cubierto por el seguro del coche?

Publicado el 17 de Septiembre de 2025 by Raquel Barbadillo, Copywriter especializada en comunicación sostenible
Tiempo de lectura estimado: 5 minutos
a quién cubre el seguro auto

Cuando buscas un seguro de coche, no solo piensas en proteger tu vehículo, sino también en quién queda cubierto en la póliza. Propietario, tomador, asegurado, conductor habitual… son términos que aparecen en cualquier contrato y que pueden generar confusión. 

En este artículo te explicamos de manera sencilla qué personas figuran en un seguro de coche y cómo afecta a la cobertura.

¿Quiénes figuran en un seguro de coche?

En una póliza de coche aparecen distintos actores, cada uno con un papel específico. Aunque en muchos casos coinciden, no siempre son la misma persona.

 

¿Qué significa?

¿Qué cubre o implica?

Propietario

Dueño legal del vehículo.

Debe aparecer en el permiso de circulación.

Tomador

Quien contrata y paga el seguro.

Responsable de abonar la prima.

Asegurado

Quien disfruta de la cobertura.

Puede coincidir con el tomador o no.

Conductor habitual

Persona que conduce con más frecuencia.

Debe declararse para ajustar el riesgo.

Propietario vs. tomador vs. asegurado

El propietario es el titular del coche en los papeles oficiales, el tomador es quien firma y paga la póliza, y el asegurado es la persona protegida por el seguro. En muchos casos coinciden, pero no siempre.

¿Pueden ser personas distintas?

Sí. Por ejemplo, un padre puede ser el tomador y propietario del coche, pero declarar a su hijo como conductor habitual y asegurado. Lo importante es que la aseguradora conozca la relación para aplicar la prima adecuada.

¿Cubre el seguro a cualquier conductor?

Una de las dudas más frecuentes es si cualquier persona que se ponga al volante está cubierta por el seguro. La respuesta depende del tipo de póliza y de lo que figure en el contrato.

Seguro a todo riesgo

Las pólizas a todo riesgo suelen ofrecer mayor flexibilidad. Generalmente, incluyen a otros conductores ocasionales. Sin embargo, esta duda debes resolverla con tu aseguradora. Consulta las condiciones particulares para evitar sustos.

Seguro a tercerosterceros ampliado

Con el seguro a terceros, se cubre al conductor, en caso de sufrir daños físicos permanentes en un accidente. Asimismo se indemniza a los beneficiarios en caso de fallecimiento.

¿Qué sucede si el conductor no es el titular o tomador?

No siempre conduce el coche la persona que figura como titular o tomador del seguro. Lo ideal es incluir en la póliza la figura del conductor adicional.

Casos comunes

Es habitual que un hijo utilice el coche de sus padres o que un amigo lo conduzca en alguna ocasión puntual. Estos casos suelen estar cubiertos si se han declarado correctamente o si son situaciones excepcionales.

Riesgos y posibles sanciones o exclusiones

Si la aseguradora detecta que hay un conductor habitual no declarado (por ejemplo, un hijo joven con poca experiencia), puede imponer recargos, rechazar la cobertura o incluso anular la póliza. Es fundamental ser transparente al contratar.

¿Puede estar el seguro a nombre de otra persona?

Efectivamente. Existen situaciones en las que el seguro no está a nombre del propietario del coche.

¿Legalmente permitido y qué condiciones implica?

Sí, es legal. El tomador puede ser distinto del propietario, siempre que exista un vínculo claro y que la aseguradora lo acepte. Esto suele darse en familias, cuando los padres aseguran el coche de sus hijos.

Consideraciones en caso de accidente

Si ocurre un siniestro y la aseguradora entiende que ha habido ocultación de información (por ejemplo, no declarar al conductor real), puede reducir la cobertura o exigir el pago de los daños. La honestidad es clave para evitar problemas.

Consecuencias legales y fiscales

Además de la cobertura, es importante considerar los aspectos legales y económicos que supone declarar a un conductor u otro en la póliza.

Responsabilidad en caso de siniestro

En cualquier accidente, la responsabilidad recae sobre el conductor que llevaba el coche en ese momento. Sin embargo, si no estaba autorizado o no figuraba en la póliza, pueden surgir conflictos con la aseguradora.

Posible incremento en la prima

Declarar a un conductor adicional, joven, con menos experiencia o con un historial elevado de siniestros puede aumentar el precio de la póliza. Las aseguradoras siempre ajustan la prima en función del riesgo que asume.

TE PUEDE INTERESAR: 

Preguntas frecuentes sobre a quién cubre el seguro de coche

¿El seguro me cubre si no soy el titular ni el tomador?

Sí, siempre que estés autorizado y declarado en la póliza.

¿Puede mi hijo conducir mi coche si no aparece en la póliza?

Podrías tener repercusiones si es conductor habitual. Para evitar riesgos, lo recomendable es declararlo.

¿Puedo asegurar el coche a nombre de otra persona?

Sí, es legal, siempre que haya transparencia con la aseguradora.

¿El seguro a terceros cubre al conductor si no está identificado como asegurado?

El seguro a terceros cubre los daños a terceros y al conductor (obligatorio), pero no los daños al propio vehículo.

¿Incrementa la prima si permito que otra persona conduzca habitualmente?

Depende de la compañía de seguros y de las coberturas te tengas contratadas. En algunos casos, puede aumentar según la edad, experiencia y perfil de riesgo de ese conductor.