Mantenimiento de un vehículo y el gasto que conlleva

Publicado el 13 de Mayo de 2023 by Raquel Barbadillo, Copywriter especializada en comunicación sostenible
Tiempo de lectura estimado: 3 minutos

Cuando nos vamos a comprar un coche nuevo, normalmente solo tomamos en consideración su precio y nos olvidamos de todos los gastos que un vehículo suele acarrear. Como resultado y a raíz de la crisis económica, muchas personas se han comprado coches que no pueden mantener. Para que eso no te suceda, ahora nuestra compañía de seguros te brinda un análisis pormenorizado de los gastos fijos y ocultos que tiene un vehículo.

Los gastos fijos por concepto de impuestos y seguros

Los coches acarrean una serie de gastos que son prácticamente invariables. Uno de ellos son los seguros de coche puesto que, como son obligatorios por ley, demandan el desembolso de varios cientos de euros al año.

Como puedes presuponer, el precio de los seguros de coche depende de varios factores, como la edad del conductor, su historial de conducción, el modelo y la cilindrada del coche así como la compañía de seguros que elijas. Grosso modo, se puede afirmar que el precio medio de las diferentes modalidades de seguros de coche es: 378 euros para terceros básico, 426 euros para terceros ampliado, 586 euros para todo riesgo con franquicia y 1.053 euros para todo riesgo sin franquicia.

Otro de los gastos anuales fijos que acarrea un coche es el Impuesto de Circulación, un gravamen que dependerá de la ciudad y del modelo del vehículo. Se conoce que en Melilla se aplica el impuesto más bajo de España mientras que en San Sebastián se aplica el más caro. La diferencia no es nada despreciable puesto que estamos hablando de cinco veces más.

También deberás considerar el Impuesto de Matriculación, que se paga una sola vez en el momento en que compras el coche, sin importar si se trata de un modelo nuevo o de segunda mano. Este impuesto se calcula en base a las emisiones de CO2 del vehículo y varía desde el 0% para coches cuyas emisiones sean iguales o menores a 120g/km de CO2 hasta el 14,75% para aquellos cuyas emisiones sean mayores o iguales a 200 g/km de CO2.

El costo del mantenimiento

Se estima que el mantenimiento de un coche puede representar hasta un 40% de su costo inicial. Según un estudio publicado por el diario El Mundo, durante un periodo de tres años, las revisiones de rutina recomendadas por el fabricante suelen demandar el desembolso de unos 785 euros mientras que la sustitución de las piezas desgastadas, como los neumáticos y los filtros, demandan unos 420 euros. Obviamente, el mantenimiento correctivo es el más caro ya que puede costar una media de 1.825 euros.

Por supuesto, estas cifras varían según el segmento. El costo de mantenimiento de un coche utilitario (segmento B) gira alrededor de los 6.200 euros mientras que para una gran berlina (segmento E) será necesario desembolsar más de 12.000 euros. Los turismos compactos (segmento C), que son los más vendidos, necesitarán aproximadamente unos 7.100 euros.

El combustible: Ese gran agujero negro

En los últimos meses el precio del combustible ha crecido de forma exponencial, por eso no es extraño que este sea uno de los mayores gastos que presupone mantener un coche. Se estima que un turismo con 90.000 kilómetros ha consumido unos 5.300 euros, lo cual presupone casi el 66% del coste total del mantenimiento.

Una vez más, el gasto dependerá del modelo. Por ejemplo, un utilitario (segmento B) consumirá unos 3.620 euros por concepto de combustible mientras que una gran berlina (segmento E) demandará unos 8.216 euros.

Impuesto de transmisiones patrimoniales de un coche: cómo se calcula

Publicado el 18 de Diciembre de 2025 by Raquel Barbadillo, Copywriter especializada en comunicación sostenible
Tiempo de lectura estimado: 6 minutos
Transmisiones Patrimoniales

Si estás pensando en comprar un coche de segunda mano, conviene que sepas que no solo tendrás que pagar el precio acordado con el vendedor. También hay una serie de gastos asociados al cambio de titularidad del vehículo. Entre ellos, uno de los más importantes es el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, conocido como ITP.

Este impuesto es obligatorio cuando compras un coche usado a un particular. Forma parte de los trámites necesarios para formalizar la compraventa y poder poner el vehículo a tu nombre. A continuación te explicamos qué es, cómo se calcula, quién debe pagarlo y cómo hacerlo paso a paso.

Qué es el impuesto sobre transmisiones patrimoniales de un coche

El Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) es un tributo que se paga cuando se transmite la propiedad de un bien usado entre particulares. En el caso de los vehículos, se aplica cuando compras un coche, una moto o un ciclomotor de segunda mano a una persona física.

Si el vendedor es un concesionario o una empresa, no se paga ITP, ya que la operación está sujeta a IVA. Pero si la transacción es entre particulares, el comprador está obligado a liquidar este impuesto ante la Hacienda de su comunidad autónoma.

El ITP se regula en el Real Decreto Legislativo 1/1993, que aprueba la Ley del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados. En el caso de los vehículos, su finalidad es que la Administración reciba una parte proporcional del valor del bien transmitido.

Es importante tener claro que el ITP es un requisito previo al cambio de titularidad del coche en la Dirección General de Tráfico (DGT). Hasta que no esté pagado, no podrás hacer la transferencia ni figurar como nuevo titular en el permiso de circulación.

Cómo se calcula el impuesto de transmisiones patrimoniales

El importe del ITP no es el mismo en todas las comunidades autónomas, ya que cada una aplica su propio tipo impositivo dentro de los márgenes permitidos por la ley. En general, el tipo suele situarse entre el 4% y el 8% del valor real del vehículo.

Para calcularlo, no se utiliza el precio de compraventa que figure en el contrato, sino el valor que la Administración da al coche según las tablas oficiales publicadas cada año por el Ministerio de Hacienda.

Estas tablas recogen el valor venal de los vehículos, es decir, su valor de mercado teniendo en cuenta su antigüedad, marca, modelo y versión. A partir de ese valor, se aplica un porcentaje de depreciación según los años que tenga el coche. Estos porcentajes están recogidos en una orden ministerial publicada cada año en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Cuantos más años tenga el vehículo, menor será este valor y, por tanto, menos pagarás de ITP.

Por ejemplo, si el valor venal de un coche de ocasión es de 20.000 euros y tiene 6 años, se aplica un coeficiente de depreciación del 28%, quedando en 5.600 euros. Si el tipo impositivo en tu comunidad autónoma es del 6%, el ITP a pagar sería de 336 euros.

Quién paga el impuesto de transmisiones patrimoniales de un coche​

El responsable de pagar el ITP es siempre el comprador, no el vendedor. Esto significa que, si compras un coche usado a un particular, tú debes presentar y abonar el impuesto ante la Hacienda autonómica correspondiente a tu lugar de residencia.

El vendedor por su parte, debe conservar una copia del contrato de compraventa y asegurarse de que el nuevo titular hace el cambio de nombre correctamente, ya que mientras el coche no esté a nombre del comprador, las posibles sanciones o impuestos seguirán llegando al antiguo titular.

Es importante que ambas partes firmen el contrato de compraventa por duplicado, indicando con claridad los datos del vehículo, el precio acordado, la fecha y los datos personales de comprador y vendedor. Este documento servirá como prueba ante Hacienda y la DGT.

Cómo pagar el ITP

El pago del ITP se realiza ante la Agencia Tributaria de la comunidad autónoma donde resida el comprador. El trámite puede hacerse de forma telemática, a través de la sede electrónica de la administración autonómica, o presencialmente en sus oficinas.

Los pasos habituales son:

  1. Rellenar el modelo correspondiente. Puedes hacerlo online (con certificado digital) o descargarlo para presentarlo en papel.
  2. Adjuntar la documentación necesaria: contrato de compraventa firmado por ambas partes, copia del DNI del comprador y del vendedor, y el permiso de circulación y la ficha técnica del vehículo.
  3. Pagar el importe del impuesto. Se puede hacer por banca electrónica o directamente en la entidad colaboradora.
  4. Guardar el justificante del pago. Es imprescindible para hacer el cambio de titularidad en la DGT.

Una vez pasado el ITP, tendrás que acudir a Tráfico para formalizar la transferencia del coche. En la Jefatura Provincial de la DGT te pedirán el justificante del pago del impuesto, el contrato de compraventa y el resto de la documentación del vehículo. Aunque lo más sencillo es realizar el trámite online.

Recuerda que, además, conviene comunicar la operación a tu compañía de seguros o revisar si el seguro actual del vehículo puede mantenerse o es necesario contratar uno nuevo antes de circular.

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Preguntas frecuentes 

¿Cuánto se paga de Impuesto de Transmisiones Patrimoniales por un coche?

Depende de la comunidad autónoma y del valor del vehículo según las tablas oficiales del Ministerio de Hacienda. Como referencia, el tipo aplicable suele estar entre el 4% y el 8%.

¿Cuándo no se paga el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales de un coche?

No se paga cuando la compraventa se realiza entre una persona particular y un concesionario, ya que en ese caso el coche está sujeto a IVA. Tampoco se paga si se trata de una transmisión gratuita, como una herencia o donación, que se regula mediante otros impuestos (Sucesiones o Donaciones).

¿Cuánto se paga a Hacienda por transferir un coche?

Lo que se paga a Hacienda depende del valor venal del vehículo, del porcentaje de depreciación por antigüedad y del tipo impositivo de tu comunidad autónoma. A ello debes añadir la tasa de Tráfico por cambio de titularidad.

¿Cuánto te quita Hacienda por vender un coche en 6.500 €?

Si vendes un coche, no pagas el ITP. Sin embargo, si obtienes una ganancia respecto al precio al que lo compraste, deberás declararla como incremento patrimonial en el IRPF. Por ejemplo, si lo compraste por 5.000 € y lo vendes por 6.500 €, deberías declarar la diferencia (1.500 €) como beneficio.

¿Cuánto se paga por transferencia de vehículo?

En total, entre el impuesto de transmisiones y la tasa de la DGT, el coste medio ronda entre 150 y 400 euros, dependiendo del valor del coche y del tipo impositivo de tu comunidad.

¿Qué pasa si no pago el ITP de mi coche?

No podrás cambiar el titular del vehículo en Tráfico, ya que te pedirán el justificante del pago del impuesto. Además, Hacienda podría imponer recargos e intereses si el pago se realiza fuera de plazo. El plazo para presentarlo es de 30 días hábiles desde la fecha de la compraventa.