Cómo aparcar en batería: guía paso a paso

Publicado el 22 de Mayo de 2025 by Raquel Barbadillo, Copywriter especializada en comunicación sostenible
Tiempo de lectura estimado: 7 minutos
Coches aparcados en batería

A todo conductor le pasa: en ocasiones no aparcas de una sola maniobra en batería. ¿Verdad? Si alguna vez te has encontrado girando demasiado pronto, demasiado tarde o temiendo rozar el coche de al lado, te contamos cómo hacerlo bien, tanto de frente como marcha atrás y te daremos consejos que te harán ganar confianza al volante.

¿Qué significa aparcar en batería?

Aparcar en batería consiste en estacionar el coche perpendicular a la acera o al carril de circulación. Las plazas están colocadas una al lado de otra, con los coches en paralelo.

¿En qué se diferencia de otros tipos de aparcamiento?

  • Aparcar en línea: el coche queda paralelo a la acera. Se usa mucho en calles estrechas.
  • Aparcar en oblicuo: los vehículos se sitúan en diagonal respecto al bordillo, similar a en batería, pero el ángulo respecto a la vía es de menos de 90 grados.

Tipos de aparcamiento en batería

Aunque lo enseñan en la autoescuela, al volante te vas a encontrar con la necesidad de aparcar en batería con diferentes factores que afecten a cómo hacer la maniobra más fácil.

Aparcamiento en batería de frente

Es el más intuitivo. Basta con girar y entrar directamente en la plaza. Es rápido, pero tiene un inconveniente: al salir, la visibilidad es peor, sobre todo si hay coches grandes a los lados.

Aparcar en batería marcha atrás

Aunque cuesta más cogerle el truco, aparcar marcha atrás te da mejor visibilidad al salir y mayor control del coche. En algunas calles con tráfico intenso o plazas estrechas, la DGT recomienda el aparcamiento en espiga reverso.

Aparcar en batería diagonal u oblicua

Estas plazas no están a 90 grados respecto a la acera, sino en ángulo (45° o 60°). Son comunes en parkings con pasillos estrechos porque facilitan la entrada y salida. Aquí lo importante es seguir la dirección marcada por la señalización y respetar los dibujos en el asfalto para no ocupar más de una plaza.

Paso a paso para aparcar en batería correctamente

Vamos al grano. Tanto si aparcas de frente como marcha atrás, estos son los pasos que debes seguir:

Si vas a aparcar de frente en batería:

  1. Reduce la velocidad y señaliza con el intermitente.
  2. Al pasar junto a la plaza, ábrete ligeramente y después gira el volante suavemente hacia ella.
  3. Alinea el coche dentro de las líneas y avanza despacio hasta que el morro esté a unos 30-50 cm del bordillo o tope.

Si aparcas marcha atrás:

  1. Señaliza la maniobra y coloca el coche más allá de la plaza.
  2. Pon la marcha atrás y gira el volante hacia la plaza.
  3. Usa los retrovisores para controlar los laterales y ajusta el ángulo de entrada.
  4. Endereza cuando estés dentro y avanza hasta que quede bien alineado.

Referencias visuales para aparcar en batería

No hay magia, solo puntos de referencia. Aquí tienes algunos de los más frecuentes:

  • Espejo retrovisor alineado con la línea de la plaza: buen momento para empezar a girar.
  • Rueda trasera a la altura del extremo de la plaza: si vas marcha atrás, es tu punto clave para iniciar el giro.
  • Espacio visible en ambos retrovisores: si ves partes iguales del coche a cada lado, estás centrado.

Cómo aparcar en batería con columnas u obstáculos laterales

Aparcar entre columnas o cerca de paredes requiere paciencia y buen control del volante. Aunque en realidad es lo mismo que si tuvieras un coche al lado, en realidad una colisión, por despacio que sea, tendrá como consecuencia una abolladura o que se te raye la pintura. Sigue estos consejos:

  • Usa los retrovisores como tus mejores aliados.
  • Gira lo justo para no tocar el lateral.
  • Avanza o retrocede en pequeñas maniobras para no arriesgarte a rozaduras.

Diferencias entre aparcar en batería, en paralelo y en línea

Aunque lo ideal sería poder elegir cómo aparcar, la mayoría de veces el tipo de plaza viene impuesto por el entorno. Por eso es importante saber adaptarse y tener pericia con cualquier tipo de maniobra.

  • Aparcar en batería:

Se entra directamente en la plaza (de frente o marcha atrás), con giros suaves y sin demasiadas correcciones. Es más fácil si hay espacio lateral, pero requiere buena orientación, sobre todo al salir si has aparcado de frente.

  • Aparcar en paralelo:

Necesita más técnica. Aquí sí o sí hay que maniobrar, girar a fondo y retroceder en el ángulo justo. Es frecuente en ciudad, y exige precisión para no quedar ni muy pegado ni muy separado del bordillo y a la misma distancia de ambos laterales.

  • Aparcar en línea:

No debería darte complicaciones si hay hueco suficiente. Basta con alinear bien el coche y controlar la distancia lateral, sin olvidar la posición respecto al bordillo.

Errores comunes al aparcar en batería y cómo evitarlos

Aquí tienes los fallos que más se repiten y cómo solucionarlos:

  • Entrar demasiado pronto: el coche queda torcido. 

Solución: avanza un poco más antes de girar.

  • Girar tarde: puede que no consigas entrar. 

Solución: marca tu punto de giro con una referencia.

  • Olvidar los retrovisores: es la mejor forma de rozar al vecino. 

Solución: úsalos siempre.

  • Frenar bruscamente: puedes chocar con el bordillo o el tope. 

Solución: entra despacio y con suavidad.

Consejos para aprender a aparcar en batería si estás empezando

Si aún no le has cogido el truco a esta maniobra, lo primero es practicar en espacios amplios y tranquilos, como un aparcamiento vacío o una calle sin tráfico. Coloca conos, cajas o referencias visuales para simular coches u obstáculos reales. Así puedes repetir los movimientos sin presión y ganar confianza poco a poco. Recuerda que cada coche gira distinto: cuanto más entrenes con tu vehículo, mejor sabrás cómo responde.

También es útil que te apoyes en los retrovisores y, si los tienes, en los sensores o la cámara de marcha atrás, pero sin depender totalmente de ellos. 

Al principio, aparcar de frente puede resultarte más sencillo, pero te recomendamos que practiques también marcha atrás, ya que es más seguro al salir y obligatorio en muchas situaciones. Y sobre todo, no te frustres si no lo haces perfecto a la primera: incluso los conductores con experiencia siguen corrigiendo a veces.

Qué dice la DGT sobre aparcar en batería

La Dirección General de Tráfico recomienda aparcar en batería marcha atrás siempre que sea posible, por seguridad al salir. Además, en los exámenes de conducir es común que te pidan aparcar en batería marcha atrás, por lo que conviene dominar esta maniobra.

TE INTERESA:

Preguntas frecuentes sobre cómo aparcar en batería

¿Qué referencias debo seguir para aparcar en batería correctamente?

Alinea tu retrovisor o rueda trasera con el inicio de la plaza. Observa los retrovisores para comprobar que entras centrado y sin invadir otras plazas.

¿Es mejor aparcar en batería de frente o marcha atrás?

Marcha atrás es más segura al salir y más precisa si te acostumbras. De frente es más rápida, pero con peor visibilidad al incorporarte a la circulación.

¿Puedo aparcar en batería en cualquier dirección?

No. Debes seguir el sentido de la circulación. Si las plazas están en sentido contrario, no está permitido girar en medio de la vía para entrar.

¿Qué hago si el espacio para aparcar es muy justo?

Haz la maniobra con cuidado, usando pequeñas correcciones. Presta atención a posibles roces, topes y el entorno que te rodea.

¿Cómo afecta el tipo de vehículo al aparcar en batería?

Por un lado, los coches largos, como SUVs o furgonetas, requieren mayor espacio y visibilidad. Si tienes cámara trasera o sensores, úsalos como complemento, no como única referencia. Tanto en vehículos automáticos como en los de cambio de marcha manual, tendrás que utilizar la marcha atrás y hacia adelante para ajustar el aparcamiento.

¿Quién está cubierto por el seguro del coche?

Publicado el 17 de Septiembre de 2025 by Raquel Barbadillo, Copywriter especializada en comunicación sostenible
Tiempo de lectura estimado: 5 minutos
a quién cubre el seguro auto

Cuando buscas un seguro de coche, no solo piensas en proteger tu vehículo, sino también en quién queda cubierto en la póliza. Propietario, tomador, asegurado, conductor habitual… son términos que aparecen en cualquier contrato y que pueden generar confusión. 

En este artículo te explicamos de manera sencilla qué personas figuran en un seguro de coche y cómo afecta a la cobertura.

¿Quiénes figuran en un seguro de coche?

En una póliza de coche aparecen distintos actores, cada uno con un papel específico. Aunque en muchos casos coinciden, no siempre son la misma persona.

 

¿Qué significa?

¿Qué cubre o implica?

Propietario

Dueño legal del vehículo.

Debe aparecer en el permiso de circulación.

Tomador

Quien contrata y paga el seguro.

Responsable de abonar la prima.

Asegurado

Quien disfruta de la cobertura.

Puede coincidir con el tomador o no.

Conductor habitual

Persona que conduce con más frecuencia.

Debe declararse para ajustar el riesgo.

Propietario vs. tomador vs. asegurado

El propietario es el titular del coche en los papeles oficiales, el tomador es quien firma y paga la póliza, y el asegurado es la persona protegida por el seguro. En muchos casos coinciden, pero no siempre.

¿Pueden ser personas distintas?

Sí. Por ejemplo, un padre puede ser el tomador y propietario del coche, pero declarar a su hijo como conductor habitual y asegurado. Lo importante es que la aseguradora conozca la relación para aplicar la prima adecuada.

¿Cubre el seguro a cualquier conductor?

Una de las dudas más frecuentes es si cualquier persona que se ponga al volante está cubierta por el seguro. La respuesta depende del tipo de póliza y de lo que figure en el contrato.

Seguro a todo riesgo

Las pólizas a todo riesgo suelen ofrecer mayor flexibilidad. Generalmente, incluyen a otros conductores ocasionales. Sin embargo, esta duda debes resolverla con tu aseguradora. Consulta las condiciones particulares para evitar sustos.

Seguro a tercerosterceros ampliado

Con el seguro a terceros, se cubre al conductor, en caso de sufrir daños físicos permanentes en un accidente. Asimismo se indemniza a los beneficiarios en caso de fallecimiento.

¿Qué sucede si el conductor no es el titular o tomador?

No siempre conduce el coche la persona que figura como titular o tomador del seguro. Lo ideal es incluir en la póliza la figura del conductor adicional.

Casos comunes

Es habitual que un hijo utilice el coche de sus padres o que un amigo lo conduzca en alguna ocasión puntual. Estos casos suelen estar cubiertos si se han declarado correctamente o si son situaciones excepcionales.

Riesgos y posibles sanciones o exclusiones

Si la aseguradora detecta que hay un conductor habitual no declarado (por ejemplo, un hijo joven con poca experiencia), puede imponer recargos, rechazar la cobertura o incluso anular la póliza. Es fundamental ser transparente al contratar.

¿Puede estar el seguro a nombre de otra persona?

Efectivamente. Existen situaciones en las que el seguro no está a nombre del propietario del coche.

¿Legalmente permitido y qué condiciones implica?

Sí, es legal. El tomador puede ser distinto del propietario, siempre que exista un vínculo claro y que la aseguradora lo acepte. Esto suele darse en familias, cuando los padres aseguran el coche de sus hijos.

Consideraciones en caso de accidente

Si ocurre un siniestro y la aseguradora entiende que ha habido ocultación de información (por ejemplo, no declarar al conductor real), puede reducir la cobertura o exigir el pago de los daños. La honestidad es clave para evitar problemas.

Consecuencias legales y fiscales

Además de la cobertura, es importante considerar los aspectos legales y económicos que supone declarar a un conductor u otro en la póliza.

Responsabilidad en caso de siniestro

En cualquier accidente, la responsabilidad recae sobre el conductor que llevaba el coche en ese momento. Sin embargo, si no estaba autorizado o no figuraba en la póliza, pueden surgir conflictos con la aseguradora.

Posible incremento en la prima

Declarar a un conductor adicional, joven, con menos experiencia o con un historial elevado de siniestros puede aumentar el precio de la póliza. Las aseguradoras siempre ajustan la prima en función del riesgo que asume.

TE PUEDE INTERESAR: 

Preguntas frecuentes sobre a quién cubre el seguro de coche

¿El seguro me cubre si no soy el titular ni el tomador?

Sí, siempre que estés autorizado y declarado en la póliza.

¿Puede mi hijo conducir mi coche si no aparece en la póliza?

Podrías tener repercusiones si es conductor habitual. Para evitar riesgos, lo recomendable es declararlo.

¿Puedo asegurar el coche a nombre de otra persona?

Sí, es legal, siempre que haya transparencia con la aseguradora.

¿El seguro a terceros cubre al conductor si no está identificado como asegurado?

El seguro a terceros cubre los daños a terceros y al conductor (obligatorio), pero no los daños al propio vehículo.

¿Incrementa la prima si permito que otra persona conduzca habitualmente?

Depende de la compañía de seguros y de las coberturas te tengas contratadas. En algunos casos, puede aumentar según la edad, experiencia y perfil de riesgo de ese conductor.